COCOSO, VALLS Y LOS MEDIOS

26 de febrero de 2008.

I N D I C E . . .

Ruperto Portela Alvarado

rupertoportela@yahoo.com.mx

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Chisme Editorial...

Contra todo lo que se diga, en Chiapas estamos pasando los peores días de la censura contra los periodistas y los medios de comunicación. De alguna manera la estructura de gobierno siempre ha optado por contener la crítica mientras que los editores, dueños o los mismos agentes de los medios han contribuido a censurar los contenidos.
Ni en los momentos críticos de Juan Sabines Gutiérrez, a quien una vez le dijeron que hiciera un periódico que fuera de su propiedad y tajante contestó: ¿para qué? si ya todos los tengo comprado.
Por supuesto que Sabines Gutiérrez tuvo un buen trato con los medios de comunicación tal y como lo tuvo Patrocinio González Garrido aún con su forma drástica de ser con todos los sectores sociales. Pablo Salazar fue otro censor de los medios de comunicación e inclusive estuvo impulsando una ley en contra de los periodistas que al final de cuentas no pudo consolidar.
Ahora las cosas son diferentes porque desde la coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado y desde la similar del Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez se pretende cerrar la crítica hacia la acción oficial. Creo que Jaime Culebro se equivocó en su función y en el pecado llevó la penitencia. Su forma de actuar contra los medios de comunicación lo llevaron a la renuncia como seguramente también llevará a Jacobo Enelcavé por no tener una condescendencia con los compañeros periodistas.
En la comuna tuxtleca también se están dando estos tratos que no son nada buenos para los periodistas. José Rosember Ovilla Martínez cree que todos le deben pleitesía y que lo que hace su patrón el presidente municipal, Jaime Valls Esponda está bien a cabalidad. No es cierto, porque el hijo del Ministro de la Suprema Corte de Justicia solo está haciendo política barata para impresionar, para populachear y hacer creer que él será el próximo gobernador del Estado.
Estoy de acuerdo con Jaime Valls porque tanto él como su padre Sergio Valls Hernández están encaramados en el poder y desde ahí pueden impulsarse a la gobernatura. Seguramente lo que el Ministro no pudo hacer en su tiempo lo podrá hacer a través de su hijito y por eso desde la dirección de Comunicación Social a cargo de Pepe Ovilla están tratando de que no lo toquen ni con el pétalo de una rosa.
Entiendo bien que Valls Esponda vino a Chiapas para ser diputado federal con las siglas del PRI, pero al no conseguirlo se fue por la vía que tomó Juan Sabines Guerrero a través del PRD y se colgó de la bufanda del hijo del Ciclón al no tener arraigo ni popularidad ante la chiapanecada. Para nadie es un secreto que el proyecto del ahora Presidente Municipal es la gobernatura del Estado y que su papá lo está promoviendo con la consigna del mismo gobernador JJSabines.
Por supuesto que Jaime Valls tiene todo el derecho de aspirar a la primera magistratura del Estado, solo que no tiene militancia ni en el PRI ni el en PRD y no creo que el PT, Convergencia y el Verde Ecologista tengan la fuerza como para hacerlo siquiera candidato.
Hasta hoy, a menos de sesenta días de gobierno municipal, no se puede hacer una evaluación de la capacidad administrativa de este gobierno municipal que desde el inicio está muy cuestionado. Seguramente que desde la coordinación de Comunicación Social están queriendo hacer una imagen de Jaime Valls que ni tiene ni puede conseguir puesto que a la presidencia municipal entró con calzador.
Ahora resulta que nadie puede hacer una crítica ni al gobierno estatal ni al municipal porque se han canonizado frente a los medios de comunicación. Pero lo que no entienden los comunicadores sociales es que hoy están en el puesto y mañana serán lo mismo que nosotros. ¡Cuidado con las patrañas!...