¿Licencia para ejercer un derecho humano?

¿Licencia para ejercer un derecho humano?

Es decir, ¿la libertad de expresión?

Hace unos días, participé en una charla de estudiantes de Comunicación en la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach). El debate se centraba en la "regulación del ejercicio periodístico".

De entrada, la asesora o académica del grupo planteaba, así como la mayoría de los alumnos, la necesidad de que quien ejerza el periodismo porte una licencia, porque el periodismo, según ella, es una "profesión" y no un "oficio".

La licencia, argumentaba uno que otro alumno, debe considerar la formación universitaria relacionada con carreras como comunicación social, ciencias de la comunicación, o algo así, para que se pruebe que la persona tiene la formación "profesional".

¿Acaso el mero hecho de pasar por la universidad te hace profesional o periodista? Considero que no, así como tampoco coincido con el discurso de que estudiar Ciencias de la Comunicación te hace periodista.

-¿Y dónde queda mi formación profesional en Comunicación? -reviró un joven.

En eso recordé a un par de editores que una tarde discutían o planteaban que quien reportee para la Sección Salud de un periódico sea una persona que haya estudiado medicina, y quien reportee para la Sección de Economía sea un economista.

-¿Y dónde quedo? -insistió preocupado el joven.

Considero que el buen reportero o periodista se forja en el "oficio", día a día, y es por eso que la concepción del periodista no se debe limitar al término "profesión". El ejercicio periodístico descansa en la materia prima que es un derecho humano: la información. Quien sea periodista o buen periodista, que se lo digan sus lectores y no un documento o una licencia, porque el único capital que tenemos es la credibilidad.

¿Y cómo obtengo la credibilidad? Ésta pregunta no la hizo el joven.


Abenamar Sánchez
Reportero

zoque1002@hotmail.com